El artículo 16 de La Ley de Prevención de Riesgos Laborales 31/95 define la evaluación de riesgos laborales como la actuación consistente en detectar los riesgos de un puesto de trabajo, los posibles efectos y las medidas necesarias para solventarlo.
Se lleva a cabo por personas con la debida formación, técnicos en riesgos laborales, bien designados por la propia empresa como externalizándolo en servicios de prevención ajenos, lo cuales realizarán evaluaciones de riesgos y acciones de formación e información a los trabajadores con la finalidad de evitar accidentes y enfermedades profesionales.
En un primer lugar se identifican y analizan los riesgos asignándoles un valor en cuanto a su peligrosidad, riesgos leves, graves y muy graves, y con probabilidad baja, media o alta
Con posterioridad se clasificarán en los niveles trivial, tolerable, moderado, importante e intolerable, y por último se valoran estableciéndose medidas para evitar y controlarlos.
Ha habido un acontecimiento que ha afectado a toda nuestra sociedad desde hace año y medio que es la pandemia del covid-19.
¿Existe alguna forma de controlar este riesgo en la empresa?
Aunque “a priori” se considere el efecto del SARS-CoV-2 como un riesgo “no laboral”, sino más bien una situación de Salud Pública, es ineludible que en los escenarios de trabajo “post pandemia” deberá evaluarse la exposición viral como un agente biológico nuevo emergente.
La vuelta al trabajo en la “nueva normalidad” hace necesaria una reorientación de la actividad en prevención de riesgos laborales en la que se deben integrar las medidas de prevención frente a la COVID-19 en la gestión de la seguridad y salud en el trabajo, por lo que se hace imprescindible el papel de los profesionales en este ámbito. Se ha puesto de manifiesto, más que nunca, la necesidad de aplicar los principios básicos de la prevención, estableciendo protocolos que incluyan los pasos a seguir para organizar un retorno al trabajo seguro y saludable
Por ello es necesario tener en cuenta actualizando y revisando todas las evaluaciones de riesgo para integrar todas las medidas preventivas adaptando a la situación que vivimos.